¿Alguna vez has tenido la sensación de que las oficinas están anticuadas? Mientras que la mayoría de la arquitectura evoluciona, estas parecen del pasado.
De hecho, las oficinas del futuro solo están llegando de la mano de las empresas más vanguardistas, cuando sus efectos son traspasables a cualquier otra entidad.
La tendencia ahora son los espacios abiertos y la colaboración. Pero, ¿qué ventajas y desventajas reales suponen?
Los grandes precursores de las oficinas del futuro
Si hubiera que destacar dos empresas que han dado paso a las oficinas del futuro, estas serían Apple y Google sin ninguna duda.
Las compañías tecnológicas fueron pioneras a la hora de derribar los muros entre sus empleados y, la verdad, es que los resultados han acompañado.
Pero, ¿qué cambios supone esta nueva idea de oficina?
- Eliminar despachos y divisiones.
- Una filosofía de trabajo en equipo.
¿Funciona para todos? Esa es la gran pregunta. Aunque lo primero es comprender que este cambio debe repercutir en la productividad y no solo en lo estético.
¿Cuáles son las ventajas de esta medida?
Las bondades de esta forma de entender la oficina las conocemos todos:
- Una iluminación natural por la posibilidad de disfrutar de ventanas más grandes.
- La posibilidad de optimizar más el espacio.
- Es más funcional para muchas tareas.
- La comunicación mejora entre los trabajadores.
¿Y sus desventajas?
Aunque siempre nos lo han vendido como la gallina de los huevos de oro, también tiene sus particularidades no tan positivas:
- La falta de intimidad puede molestar a muchos trabajadores.
- La concentración es la primera víctima de este sistema.
- Se produce un aumento del estrés al sentirse observado.
Al final la clave consiste en encontrar un equilibrio. Por ello profundizamos en la idea de que no debe ser solo un cambio espacial, sino de filosofía en el trabajo.
¿Estás preparado para acometerlo? Te proponemos encontrar una oficina acorde a estas necesidades. Tenemos la que buscas.