Hay lugares donde la magia de la Navidad es un tema capital. No hace falta demasiada fantasía para encontrarlos. Resaltan por sí mismos. Brillan en la oscuridad de la monotonía de fachadas interminables que no impactan en tus emociones, que te olvidarás de ellas antes de cruzar la esquina. Por ello, hoy queremos hablarte de las casas mejor iluminadas del mundo. Porque estas fechas son para creer en lo imposible.
Las casas mejor iluminadas del mundo en Navidad
La Navidad es la fecha perfecta para que una sonrisa perenne se instale en tu rostro. En diciembre la tristeza es caduca. Es sustituida por la emoción, la sensación de que el mundo confabula a tu favor para que seas feliz. Las calles exhalan ilusión y hasta el anciano más cascarrabias no puede evitar contagiarse de la energía de los más pequeños.
En este aroma inconfundible que llama a las buenas acciones, hay personas que conocen que su destino es sacar a relucir sus talentos únicos. Y es que, el mundo está tan poblado de viandantes cargados de una magia de la que ni siquiera ellos son conscientes, que, sin quererlo, conseguirán con tus gestos que te quedes estupefacto, ensimismado, que prenda la llama de la inocencia en tu corazón y entiendas que el espíritu navideño debería de durar todo el año. Su lienzo es su hogar.
Tú sabes que la energía ni se crea ni se destruye. Se transforma en arte. En historias que recorren las paredes de los hogares y que compiten con miles de estímulos para robarte esa sonrisa traicionera de los labios, la que, en Navidad, te tienta con escapar, aunque hayas tenido el día más horrible de tu vida.
Hoy queremos presentarte las tres casas mejor iluminadas del mundo en Navidad.
La casa de la familia Hyatt
Para presumir hay que sufrir. El refranero es sabio. Después de todo, alberga la sabiduría de decenas de generaciones. Y esta es una lección que se tenían aprendida fuera de nuestras fronteras. En Estados Unidos la familia Hyatt comprende la importancia de las fechas y por ello se comprometieron con la meticulosa tarea que requería de la perfección en todos sus detalles.
Seis semanas. Cuarenta y dos días. Segundos inconcebibles de manera racional. Es una inversión en familia. En la creación de vínculos que perdurarán en noches de tormenta, cuando la nieve ya se haya borrado de la puerta de su hogar.
Porque sí, dedican mes y medio de su tiempo a la construcción de esta obra de arte para los sentidos. Y, como cualquier otro lienzo que se llena con emociones, no todos son capaces de entender el mensaje que transmite. Por ello en cada Navidad son apercibidos por las autoridades, que les recuerdan que están incumpliendo la normativa municipal.
Parece ser que muchos vecinos se han quejado del fetiche por los destellos que muestra reiteradamente esta vivienda. Y es que, para ellos es una molestia que su zona de descanso se vea perturbada por un arcoiris de doscientas cuarenta mil bombillas.
La casa de Alex Goodwind
La siguiente parada en el camino es Inglaterra. La tierra de los reyes y reinas más importantes de Europa acoge otro de los grandes homenajes al espíritu navideño. Concretamente, aterrizamos en Melsham. Y es que, pese a que tengas la sensación de que el único lugar donde se lleva al extremo la pasión por el espíritu navideño es en Estados Unidos, hay muchos ingleses que sienten la misma necesidad por expresar de esta manera tan extravagante su amor por las fechas que nos ocupan.
Hay valientes que viven tan solo para este momento del año. Artistas incomprendidos que aprovechan la fuerza del arte para mandar su mensaje. Una persona que, como Alex, comienza todos los preparativos para la decoración navideña en julio. ¡En pleno verano! Bueno, a esa cosa que los ingleses pueden llamar verano…
Según nos han contando nuestras fuentes más fiables, ha habido años en los que ha invertido más de 3.000 libras en luces. ¡Casi nada!
La casa de Jane Stewart
Esta es la historia de un sueño. La consecución de una meta. Una promesa hecha al pasado que se tenía que materializar en el futuro. Ahora, sus palabras son presente, su conciencia, conocedora de que su palabra vale oro y sus anhelos, convertidos en realidad.
La magia de la Navidad nos permite alcanzar cotas que nunca imaginaríamos. Larry, que así se llamaba su marido, tenía el sueño de decorar unas fiestas su hogar tal y como lo ves en la imagen. Jane, tras su fallecimiento hace seis años, se prometió a sí misma que no descansaría hasta que convirtiera su anhelo en realidad.
Estas son las tres casas mejor iluminadas del mundo durante esta Navidad. Historias de superación, cuentos de hada que se hicieron tangibles. Tú no puedes medir un sueño y no hay mejor fecha que estas para convertirlos en realidad.
Y tú, ¿cómo estás decorando tu hogar esta Navidad? ¡Déjanos tus fotos! Queremos conocerlo.