Lo bonito del sector inmobiliario es que cada día puedes descubrir conceptos que no pensabas que existían. Como si se tratara de un volcán en ebullición, solo se muestran tal y como son cuando ya no tenemos escapatoria. Por eso, de repente, te sorprenden y te preguntas qué demonios puedes hacer. Hoy te queremos explicar qué es una cédula de habitabilidad, para cuando te toque enfrentarte a ella.
¿Qué es la cédula de habitabilidad?
La cédula de habitabilidad de una vivienda consiste en un documento que tiene la meta de acreditar que la misma cumple los requisitos mínimos para que ese espacio sea habitable por personas. De esta manera, se centra, ante todo, en temas de salubridad, higiene y la solidez del lugar.
El estudio para la dotación o no de cédula de habitabilidad se centra en:
- Superficie útil.
- Superficie mínima.
- Calidad y espacio de la cocina.
- Instalación de agua caliente.
- Etcétera.
Los requisitos no se observan desde una perspectiva demasiado exigente. Razón por la que es muy extraño que no se conceda la cédula de habitabilidad a algún inmueble. No obstante, como los por si las moscas son el mejor amigo de la tranquilidad, mejor tomar las precauciones antes de que arranque la tormenta.
¿Cómo puedo conseguir una cédula de habitabilidad de mi inmueble?
El plazo de validez de una cédula de habitabilidad es de quince años. Si se sobrepasa esta cantidad o nunca se ha poseído una, se debe contactar con un arquitecto o arquitecto técnico y solicitarle una de ellas.
Para otorgártela, primero realizará una inspección visual del inmueble para atestiguar que cumple las características mínimas que exige este documento. Posteriormente se deberá de entregar a la Administración.
¿Te ha quedado alguna duda sobre la cédula de habitabilidad?
Si tienes alguna pregunta o duda al respecto, no te olvides de formularla. Estaremos encantados de responderte a la máxima celeridad posible. Estamos aquí para ayudarte.