Han pasado ya casi dos décadas desde que Michael Jordan se retirara por tercera y última vez de su carrera deportiva ligada a la NBA. Sin embargo, transcurrirá el doble de tiempo y seguirá siendo la imagen que defina por completo el baloncesto y la NBA a lo largo de todo el mundo. El problema es que el ataque perimetral del astro del basket lleva demasiados años chocando contra una defensa que no es capaz de doblegar: la venta de su mansión en Chicago.
¿Cómo es la mansión de Michael Jordan?
A pesar de las rebajas que no para de realizar a su mansión, parece que nadie ha encontrado todavía que las cifras manejadas por la antigua estrella del baloncesto sean el precio justo que están dispuestos a afrontar.
De esta manera, la mansión de Michael Jordan cuenta con más de 5.200 metros cuadrados de superficie, pero ninguno de ellos es capaz de asombrara un comprador exigente que no aceptó en un primero el precio de 29 millones de dólares por ella y que tampoco parece propicio a uno de 14 millones.
No en vano, el mercado inmobiliario está lleno de tiburones que son conscientes de que solo hay que atacar cuando ven la sangre. Estrategas curtidos en mil aventuras y que no se dejan amedrentar por las circunstancias.
Lo importante está en el interior
Y no, con esto no queremos despreciar la impresionante verja donde el número 23 de la estrella de los Chicago Bulls luce para que nadie tenga dudas de quién vive dentro y de qué ha conseguido con el paso de los años. El problema es que esto no es más que la punta del iceberg, que en cuanto bucees un poco encontrarás elementos todavía más maravillosos.
El interior de la mansión de Michael Jordan cuenta con tantos detalles que cambiará para siempre la concepción que tienes del lujo. Comprenderás, por fin, qué significa vivir con tanto dinero que puedas darte cualquier capricho sin preocupaciones.
Pero bueno, vamos por partes, que no te queremos abrumar con nuestro jolgorio sin límites, que a veces nos emocionamos y dejamos partir lejos de nuestros labios palabras cargadas de admiración.
La mansión de Michael Jordan cuenta, como no podría ser menos, con su propia cancha de baloncesto personalizada y de tamaño real. A nosotros nos encanta mirarla y ver a un Michael Jordan en su plenitud entrenando al llegar a casa cuando todos los demás ya descansaban, consciente de que ser la mayor estrella que ha pisado las canchas de la NBA conlleva un sacrificio. Después de todo, arrebatarle el anillo a unos Jazz sobre la bocina en el último partido de las finales, no tiene precio. John Stockton todavía recuerda este momento.
Más allá de ello, también cuenta con lugares para descansar y reponerse del estrés de las jornadas del día a día. Cuenta con un lugar dedicado exclusivamente al cine, un jardín donde las horas pasan a otro ritmo y, para terminar, una piscina para sentirse el rey del mundo sin contemplaciones.
Esta es la casa de Michael Jordan, pero nos encantaría saber cuál es la que a ti te gustaría conocer, así que si nos dejas en los comentarios tus propuestas, te prometemos que trataremos de encontrar la manera de contarte cómo es dicho lugar por dentro.
Maravilloso y genial lugar!!!